7 Hábitos de Ahorro para llegar al siguiente nivel

¿Tienes algún hábito de ahorro? O ¿eres de los que cada mes se propone ahorrar, pero no lo logra? Tranquilo, con estos hábitos "hackearás" tu mente y empezarás a construir una vida financiera sana.

1. Ahorro automático: El ahorro no empieza con lo que dejas de gastar a final de mes, sino con lo que descuentas de tu salario al inicio. Para que esto se haga realidad, el mejor hábito es que la decisión de ahorrar la vuelvas automática. Configura una transferencia automática de una parte de tus ingresos a una cuenta de ahorros separada o a una opción de inversión que te lo permita, como un fondo voluntario. Esto evita la tentación de gastar antes de ahorrar y construye un hábito constante de acumulación. Ideal si lograr ahorrar al menos el 10% de tus ingresos.
2. Establecer metas financieras claras: Tener objetivos financieros específicos te brinda un propósito y una motivación para ahorrar. Ya sea comprar una casa, viajar o tener un fondo de emergencia, establecer metas claras te ayuda a enfocarte en lo que realmente importa.
3. Practicar la regla del 72 horas: Antes de realizar una compra impulsiva, espera 72 horas. Este período te da tiempo para reflexionar y evaluar si realmente necesitas esa compra. Muchas veces, la urgencia inicial disminuye, permitiéndote tomar decisiones más informadas y evitar gastos innecesarios.
4. Evitar la comparación social: La comparación constante con los demás puede llevar a decisiones financieras imprudentes. En lugar de gastar para impresionar a otros, concéntrate en tus metas y necesidades personales. Recuerda que cada persona tiene su propia situación financiera única. Si tu amigo compró un carro último modelo, no significa que tú debas comprar otro. Si tienes tu meta de ahorro clara, haz caso omiso al ruido exterior.
5. Práctica del ahorro visible: Usa métodos visuales para rastrear tus ahorros. Crea una gráfica en línea para ver cómo tu dinero crece con el tiempo. Este enfoque tangibiliza tus ahorros y refuerza la sensación de progreso.
6. Registra tus datos para matar los gastos hormiga: Hemos escuchado con frecuencia que los gastos pequeños del día a día, como un café o un chocolate, merman nuestra capacidad de ahorro poco a poco. La manera inteligente de combatirlos es registrándolos. Una vez los registres, contabilízalos cada dos semanas o mensual. Así encontrarás patrones de gastos pequeños que luego se convierten en grandes. Encontrarás, por ejemplo, que los taxis al trabajo te toman un total al mes de $500.000, y te impulsará a buscar una alternativa.
7. Influencia social positiva: En el ahorro no aplica aquello de “mejor no cuento nada porque luego no pasa”. Todo lo contrario la mejor práctica es contarle a tu familia y amigos tu meta, primero para que sientas la presión social de tener que lograrlo, y segundo, para que te ayuden a no hacer gastos superfluos.

Practicarlos todos al tiempo te garantizará un incremento progresivo en tus ahorros, lo que significa acercarte cada vez más a la meta.

Recuerda además que, si tu meta es a mediano o largo plazo, como una casa o carro, lo ideal sería identificar un producto de ahorro que te garantice rentabilidades por encima de la inflación, para que tu ahorro no se devalúe. Puede ser un fondo de inversión, un fondo voluntario o una cuenta de ahorro programado, pero verifica que tenga rentabilidad por encima de la inflación.